Tú vas como la noche de invierno, sola calle iluminada pero en niebla.
Tú vas, andas con prisa. Yo me detengo frente a vos y tú no haces más que pedirme que me aleje, yo no te doy respuestas, entonces tú lloras delicada ante mis ojos, y yo me siento quebrar como cristal ante el concreto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario